Un audiófilo local construye sus propios altavoces

En lugar de comprar costosos parlantes de alta calidad, el ingeniero eléctrico y propietario de Sound Science Neal Van Berg decidió arremangarse y construir el suyo propio.

Dos pares de parlantes gigantes y distinguibles se encuentran entre los montones de equipos de audio en Sound Science CAT (Custom Audio and Theatre), una tienda de equipos estéreo y de cine en casa en Taos que abrió en 2018. Los enormes parlantes apuntan hacia un sofá en medio de la sala, donde los clientes pueden sentarse y probar su sonido, que según Van Berg es tan excepcional que hace que los oyentes se sientan como si estuvieran en la misma sala donde tocan los músicos. Van Berg describe esto como un "escenario sonoro".

“Para muchas personas, basta con escuchar la música y las palabras”, dijo. “Para otras personas, no lo es; tiene que sonar real. Y muchas personas buscan la actuación más realista que puedan tener delante de ellos en su casa. Eso es lo que busco aquí... No sólo quiero escuchar un gran tono, sino que también quiero que pinte en mi mente una imagen de dónde están todos los intérpretes”.

Según el inventor, un muy buen sistema estéreo creará un espacio sonoro tridimensional, pero unos buenos altavoces son sólo un aspecto de ello. Para crear este espacio sonoro, buscó construir altavoces que tuvieran una “respuesta de frecuencia suave sin gabinetes exóticos”, así como graves detallados.

Los parlantes en sí están compuestos por dos woofers (altavoces diseñados para producir bajas frecuencias), mientras que un dispositivo más pequeño se ubica encima del gabinete abierto. Este dispositivo, un Heil Air Motion Transformer (AMT), mide sólo 6 pulgadas de alto, pero utiliza una cinta electromagnética condensada de 4 pies para producir sonido. Junto con los woofers, toda la unidad puede pasar de 800 hercios (ciclos de ondas sonoras por segundo) a 20.000 hercios, lo que significa, añadió Van Berg, que puede cubrir casi todo el rango de frecuencia del oído humano.

Los altavoces destacan gracias a la forma única del gabinete de madera: dos octágonos apilados uno encima del otro que albergan los woofers. Según Van Berg, al no alojar los altavoces en el gabinete típicamente rectangular, no queda ninguna energía sonora atrapada en el interior que de otro modo interferiría con los altavoces. También minimiza el desperdicio, añadió Van Berg.

Con un rango de alta frecuencia y afinidad por los graves, me viene a la mente la cuestión de la durabilidad de los altavoces. Cuando se le preguntó cuánto tiempo podían reproducir a un volumen alto, Van Berg respondió con confianza "indefinidamente". Si bien entiende que la eternidad es una exageración, todavía se esfuerza por crear dispositivos duraderos que puedan recibir golpes, agregó, después de hacer explotar Nine-Inch Nails en sus parlantes personalizados.

Interés por el sonido.

Van Berg, un audiófilo autoproclamado, dijo que se interesó por el audio cuando tenía 16 años. En aquel entonces, recordó, cuando necesitaba un mejor equipo, lo cambiaba o intentaba construirlo él mismo.

Sin embargo, su progresión hacia la audiofilia comenzó con su primer par de altavoces de calidad.

"Solía ​​tener un par de parlantes electrostáticos, que son controladores de mylar casi sin masa, y cubrían todo el rango de frecuencia de aproximadamente 30 ciclos hasta 20.000", dijo Van Berg. “Muy rápidos, muy detallados, el mejor bajo que he escuchado en mi vida, pero no sonaban particularmente fuertes, así que eso fue una desventaja. Al investigar en Internet, descubrí que podía obtener un tipo de respuesta similar de un woofer de cono típico si no cerraba la parte posterior”.

Van Berg nota su influencia de Siegfried Linkwitz, quien fue un pionero de los oradores abiertos. Al estudiar el trabajo de Linkwitz, van Berg pudo comprender lo que necesitaba para crear sus altavoces: diferentes controladores. Esto, combinado con la tecnología moderna que proporciona Heil AMT, permitió que sus parlantes se convirtieran en lo que son hoy.

Iteraciones de oradores

El modelo actual disponible para probar en Sound Science es su tercer prototipo. La primera encarnación fue un diseño de 7 pies con 16 parlantes. Su forma parabólica estabilizó las ondas sonoras y las disparó hacia adelante en línea recta hasta que chocaron contra algo y luego se dispersaron. Según Van Berg, si las ondas sonoras se dirigieran a la cabeza de alguien, en el momento del impacto, sonaría igual que si el oyente llevara auriculares, sin importar la distancia.

El segundo prototipo se acerca más al diseño actual, pero existía en un marco de madera simple. Esta versión permitió a Van Berg jugar con la funcionalidad antes de preocuparse por la estética. Una vez que estuvo satisfecho con el sonido que producían los altavoces en el marco de madera, pasó a diseñar el gabinete.

"Apuesto a que pasé más de un año angustiado por qué componentes debería comprar porque todo cuesta dinero y esos no son componentes baratos", dijo Van Berg. "Quería tener cuidado de hacerlo bien".

En la tienda se presenta un prototipo adicional, pero en lugar de un marco de madera se utiliza uno de metal. Esta versión, según Van Berg, fue más difícil de montar que la estructura de madera, aunque la funcionalidad es muy similar, afirmó.

Los altavoces no son los primeros equipos de audio que inventó Van Berg. Hace unos 15 años, él y un ex compañero de cuarto de la universidad crearon Music Vault, el primer servidor basado en PC disponible comercialmente que podía reproducir música a cualquier frecuencia de muestreo, desde archivos mp3 hasta 292.000 muestras por segundo a 24 bits. Incluso puede reproducir transmisión digital directa, que es de un solo bit a aproximadamente 3 millones de muestras por segundo.

Al visitar Sound Science en los meses más fríos, los clientes pueden notar una esfera de cobre junto al tocadiscos de Van Berg. Este es otro original de Van Berg. La esfera está unida a la tierra eléctrica del edificio y, cuando se toca, drena toda la estática del cuerpo del individuo. Esto asegura que la electricidad estática no se transfiera a sus discos de vinilo, lo que significa que acumulan menos polvo.

Inventor de toda la vida

Los días de invención de Van Berg van más allá del audio.

Diabético casi toda su vida, recuerda uno de sus primeros inventos. Cuando era joven, solía llenar demasiado sus frascos de insulina con aire para que fuera más fácil extraerlos. Sin embargo, añadió, si dejaras caer la botella llena de aire sobre una superficie dura, explotaría. Sus amigos en ese momento lo invitaron a un viaje de campamento y estaba nervioso porque su botella de insulina perecería y no podría regresar a la civilización.

“En ese momento, tenía un compañero de cuarto que era buzo”, dijo Van Berg, “y estaba mirando su traje de buceo. Me llevó con una mujer que le confeccionaba sus trajes a la medida. Le llevé un frasco de insulina y le pedí que le hiciera un profiláctico personalizado. Pude dejarlo caer desde una distancia muy alta y el material del traje absorbió el impacto y no se rompió. A esos los llamé... Aisladores.

Los “Aislantes” opacos incluso venían en diferentes colores para que los diabéticos que tomaban más de un tipo de insulina pudieran diferenciarlos.

"Por eso la gente inventa cosas: para resolver un problema que no se resuelve", dijo Van Berg. "En el caso de mis parlantes, el verdadero problema es que para conseguir parlantes que suenen tan bien como [ellos], cuesta aproximadamente $40,000 o más, y lo considero un gran problema".

Van Berg espera vender estos altavoces a gran escala durante el próximo año. Sin embargo, añadió, como operación de un solo hombre, es un proceso lento. Planea mostrar a los oradores en convenciones de audio. Una vez que estén a la venta, su objetivo es venderlos por 10.000 dólares el par.

Sound Science CAT está ubicado en 208c Paseo del Cañón y está abierto de martes a viernes de 10 am a 5 pm La tienda cierra a las 4 pm los sábados y cierra los domingos y lunes.

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